Miguelina Zapata: Necesitamos OST para los niños en DC // We need OST for children in DC

January 21, 2022

NOTE: This blog is translated in both Spanish and English. Scroll down to read the blog in English. 

Tengo tres hijos con personalidades, aspiraciones y mentalidades muy diferentes. Además de estas diferencias, mis hijos también tienen necesidades muy específicas para apoyar su educación. Creo firmemente que la educación puede impartirse más allá del horario escolar. 

Por eso abogo por los Programas Extracurriculares (OST, por sus siglas en inglés). Estos programas no sólo proporcionan un entorno seguro para nuestros estudiantes mientras no están en el aula, sino que también los ayuda a desarrollarse a través de sus planes de estudio creativos y enriquecedores.  

Desafortunadamente, no todo estudiante de nuestra comunidad de DC tiene la oportunidad de experimentar la alegría y los beneficios de los programas OST. En la Encuesta de Regreso a la Escuela de 2021 de PAVE, menos de la mitad (45%) de los encuestados informó que sus hijos participan en programas de OST. 

A pesar de que tengo el privilegio de inscribir a mis hijos en varios programas de OST, muchas de las barreras que las familias citaron como un impedimento para que sus hijos participen – dificultades para acceder a los programas, altos costos y falta de información – son las mismas barreras que tengo que tratar. 

Como madre trabajadora, puede ser difícil encontrar programas de OST que se adapten a mis horarios, que cambian con frecuencia: No siempre puedo contar con una niñera, ni quiero que mi esposo o yo perdamos un día de trabajo.

Inscribir y programar a mis hijos en el campamento de verano del Departamento de Parques y Recreación de DC fue un problema para mi familia el verano pasado. Cuando uno de los campamentos a los que habíamos planeado apuntar a nuestras hijas no tenía suficientes plazas para acomodar a ambas, mis hijas asistieron a dos programas distintos (para una de las sesiones) en dos lugares diferentes de la ciudad. No sólo fue una batalla física al tener que recoger y dejar a tres niños en sus respectivos programas, sino que también fue una batalla mental al ver cómo una de mis hijas se lo pasaba de maravilla en su programa mientras que la otra tenía una experiencia horrible, donde se negaba a quedarse en el campamento, sabiendo que su hermana mayor estaba en otro lugar que ya conocía.  

Este verano, quiero que los programas de OST reciban una mejor financiación para que puedan contratar una cantidad adecuada de personal que pueda apoyar y atender a toda la niñez que se inscriba. 

Pero incluso cuando -o si- encuentro un buen programa que se adapte a mis horarios y tenga suficientes plazas para todes mis hijos, tengo que asegurarme de que el programa se ajuste a sus intereses. Al igual que muchos niños, mis hijos cambian de opinión sobre sus intereses, pero estas mentalidades siempre cambiantes siguen mereciendo la mejor programación que apoye plenamente su aprendizaje y desarrollo. 

Si bien el informe de la encuesta PAVE sobre la vuelta a la escuela demuestra los altos niveles de interés de los estudiantes de DC por los deportes (62%), las artes (55%) y la música (52%), esto no debe significar que nos olvidemos de otros programas de OST que se relacionan con otras materias. Los programas STEM, los programas sociales y otros programas merecen nuestra atención porque hay un grupo de niños que buscan una oportunidad para conectarse con otros niños que tienen intereses similares a los suyos.

Otro cambio que quiero ver es un mejor acceso a la información sobre los programas OST actuales y futuros en todo el Distrito. Siempre estoy en línea investigando los programas OST disponibles para mis hijos. Sin embargo, siempre hay un momento en el que me entero de otros programas OST más asequibles e interesantes cuando me pasan la voz o de un correo electrónico de última hora. 

Si yo tengo problemas con el acceso que tengo, no puedo ni imaginar las experiencias que deben tener otras familias con poco o escaso acceso a Internet, con una escuela menos comprometida con la familia o que no hablan inglés. Debemos ir al encuentro de las familias allí donde están y proporcionarles la información que necesitan para acceder a la información crucial sobre estos programas. 

Por último, necesitamos programas de OST más asequibles. No puedo pagar 500 dólares por niño y por semana para que asistan a un programa de OST. Y aunque eso parece ser la norma en la ciudad, no debería ser así – especialmente cuando sólo el 28% de las familias de bajos ingresos pueden permitirse que sus hijes participen. Es nuestro deber como ciudad servir a TODAS las familias, y podemos hacerlo rediseñando el coste de los programas OST y proporcionando más ayuda financiera a quienes la necesitan.  

Como dirigenta de los padres y madres de PAVE, estoy orgullosa de luchar y abogar por arreglar estos problemas y cambiar el sistema que con demasiada frecuencia ha impedido que nuestros estudiantes participen en estos grandes programas.

Por Miguelina Zapata, Capitana de Política e integrante de la Junta de PLE del Distrito 4

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I have three children with very different personalities, aspirations, and mindsets. On top of these differences, my children also have very specific needs to support their education. I’m a firm believer that education can be provided outside of school hours. 

That’s why I advocate for Out-of-School Time (OST) Programs. These programs not only provide a safe environment for our children while they are not in the classroom, but also help our kids develop through their creative and enriching curriculums.  

Unfortunately, not every child in our DC community have an opportunity to experience the joy and benefits of OST programs. In the 2021 PAVE Back to School Survey, less than half (45%) of respondents reported that their children participate in OST programs. 

Despite my privilege to sign my children up for various OST programs, many of the barriers families cited as keeping their children from participating – struggles accessing programs, high costs, and lack of information – are the same barriers that I have to navigate. 

As a working mom, it can be difficult to find OST programs that fit my often-changing schedule: I can’t always rely on a babysitter, nor do I want my husband or I to miss a day of work.

Signing up and scheduling my children for DC Department of Parks and Recreation summer camp was a challenging issue for my family last summer. When one of the camps we had planned to sign our children up for didn’t have enough spots to accommodate them both, my daughters attended two separate programs (for one of the sessions) at two different locations in the city. Not only was it a physical battle rushing to pick up and drop off three children at their respective programs, but it was also a  mental battle as I watched one of my girls have the time of her life in her program while the other  had a horrible experience at her program, where she refused to stay in the camp, knowing that her older sister was at another location that she was already familiar with.  

This summer, I want to see OST programs better funded so that they can hire an adequate amount of staff that can support and can serve every child who signs up. 

But even when – or if – I do find a good program that fits my schedule and has enough spots for all my kids, I have to make sure the program tends to their interests. Like many kids, my children change their minds about what their interests are, but these ever-changing mindsets still deserve the best programming that fully supports their learning and development. 

While the PAVE Back to School Survey report shows DC students’ high-levels of interests for sports (62%) the arts (55%), and music (52%), this shouldn’t mean we forget about other OST programs that relate to other subjects. STEM programs, social programs, and other programs deserve our attention because there is a group of children out there looking for an opportunity to connect with other kids who have similar interests as them.

Another change I want to see is better access to the information about current AND upcoming OST programs across the District. I am always online researching available OST programs for my kids. Nevertheless, there is always a moment when I find out about other more affordable, interesting OST programs through word of mouth or a last minute email. 

If I have trouble with the access I have, I can’t even imagine the experiences other families with little or low internet access, a less family-engaged school, or may not speak English, must have. We must meet families where they are and provide the information they need to access crucial information about these programs. 

Finally, we need more affordable OST programs. I am not able to pay $500 per CHILD per WEEK for them to attend an OST program. And while that seems to be the norm in the city, it shouldn’t have to be – especially when only 28% of lower-income families can afford to have their kids participate. It’s our duty as a city to serve EVERY family, and we can do this by redesigning cost for OST programs and providing more financial aid to those that need it.  

As a PAVE parent leader, I’m proud to fight and advocate to fix these issues and change the system that has too often withheld our students from participating in these great programs. 

By Miguelina Zapata, Policy Captain and Ward 4 PLE Board member